miércoles, febrero 14, 2007

SFAS 157: Medición de Valor Razonable (4)

Aplicación a los Pasivos
15. Una medición de valor razonable supone que el pasivo es transferido a un participante del mercado en la fecha de medición (la obligación con la contraparte continúa; no es cancelada) y que el riesgo de incumplimiento relacionado con ese pasivo es el mismo antes y después de su transferencia. El riesgo de incumplimiento se refiere al riesgo de que la obligación no será satisfecha y afecta al valor por el cual el pasivo es transferido. Por lo tanto, el valor razonable del pasivo reflejará el riesgo de incumplimiento relacionado con ese pasivo. El riesgo de incumplimiento incluye, pero no se limita a, el riesgo de crédito de la propia entidad. La entidad que reporta considerará el efecto de su riesgo de crédito (calidad crediticia) sobre el valor razonable del pasivo en todos los períodos en que el pasivo se mida a valor razonable. Ese efecto puede diferir, dependiendo del pasivo, por ejemplo, si el pasivo es una obligación de entregar efectivo (un pasivo financiero) o una obligación de entregar bienes o servicios (un pasivo no financiero), o de las mejoras en los plazos del crédito relacionado, si las hubiera.
Valor Razonable en el Reconocimiento Inicial
16. Cuando se adquiere un activo o se asume un pasivo en una transacción de intercambio de dicho activo o pasivo, el precio de la transacción representa el precio pagado para adquirir el activo o recibido para asumir el pasivo (un precio de entrada). Por otro lado, el valor razonable del activo o pasivo representa el precio que se recibiría al vender el activo o se pagaría al transferir el pasivo (un precio de salida). Conceptualmente, los precios de entrada y los precios de salida son diferentes. Las entidades no necesariamente venden los activos a los precios pagados para adquirirlos. En forma similar, las entidades no necesariamente transfieren los pasivos a los precios recibidos al asumirlos.
17. En muchos casos el precio de transacción igualará al precio de salida y, por lo tanto, representa el valor razonable del activo o pasivo en el reconocimiento inicial. Al determinar si un precio de transacción representa el valor razonable del activo o pasivo en el reconocimiento inicial, la entidad que reporta considerará factores específicos de la transacción y del activo o pasivo. Por ejemplo, un precio de transacción podría no representar el valor razonable de un activo o pasivo en el reconocimiento inicial si:
  • a. La transacción es entre partes relacionadas.
  • b. La transacción ocurre bajo coacción o el vendedor es forzado a aceptar el precio en la transacción. Por ejemplo, ese pudiera ser el caso si el vendedor está experimentando una dificultad financiera.
  • c. La unidad de cuenta representada por el precio de transacción es diferente de la unidad de cuenta para el activo o pasivo medido a valor razonable. Por ejemplo, ese podría ser el caso si el activo o pasivo medido a valor razonable es sólo uno de los elementos de la transacción, incluyendo dicha transacción derechos y privilegios no declarados que debieran medirse separadamente, o si el precio de transacción incluye costos de transacción.
  • d. El mercado en que ocurre la transacción es diferente del mercado en que la entidad que reporta vendería el activo o transferiría el pasivo, esto es, el mercado principal o el más ventajoso. Por ejemplo, aquellos mercados podrían ser diferentes si la entidad que reporta es un intermediario de títulos que transa en diferentes mercados, dependiendo de si la contraparte es un cliente minorista (mercado minorista) u otro intermediario de títulos (mercado de corretaje).

Técnicas de Valuación

18. Debiera utilizarse técnicas de valuación consistentes con el enfoque de mercado, con el enfoque de ingresos y/o con el enfoque de costos para medir el valor razonable. Los aspectos claves de estos enfoque se resumen a continuación:

  • Enfoque de mercado: El enfoque de mercado utiliza precios y otra información relevante generada por las transacciones de mercado que involucran activos o pasivos idénticos o comparables (incluyendo un negocio). Por ejemplo, las técnicas de valuación consistentes con el enfoque de mercado a menudo utilizan múltiplos de mercado derivado de un conjunto de parámetros comparables. Los múltiplos pueden encontrarse en rangos para cada múltiplo de parámetros comparables. La selección de en qué lugar dentro del rango cae el múltiplo adecuado, requiere de un juicio, considerando los factores específicos de la medición (cualitativos y cuantitativos). Las técnicas de valuación consistentes con el enfoque de mercado incluyen la apreciación por matriz. La apreciación por matriz es una técnica matemática utilizada principalmente para valuar instrumentos de deuda sin descansar exclusivamente en precios cotizados para instrumentos específicos, sino más bien apoyándose en la relación de los instrumentos con otros instrumentos cotizados comparables.
  • Enfoque de Ingreso: El enfoque de ingresos utiliza técnicas de valuación para convertir montos futuros (por ejemplo, flujos de efectivo o resultados) en un sólo monto corriente (descontado). La medición está basada en el valor indicado por las expectativas corrientes de mercado respecto de aquellos montos futuros. Esas técnicas de valuación incluyen técnicas de valor presente; modelos de precios de opciones, tales como la fórmula de Black-Scholes-Merton (un modelo cerrado) y un modelo binomial (un modelo de lattice), que incorporan técnicas de valor presente y el modelo de resultados multiperiódicos, que es utilizado para medir el valor razonable de ciertos activos intangibles.
  • Enfoque de Costo. El enfoque de costo está basado en el monto que se requeriría corrientemente para reemplazar la capacidad de servicio de un activo (a menudo referido como costo de reposición corriente). Desde la perspectiva de un participante del mercado (vendedor), el precio que se recibiría por el activo se determina en base al costo para un participante del mercado (comprador) de adquirir o construir un activo sustituto de utilidad comparable, ajustado por obsolescencia. La obsolescencia comprende el deterioro físico, la obsolescencia funcional (tecnológica) y la obsolescencia económica (externa) y es más amplia que la depreciación para propósitos de reporte financiero (una distribución de costo histórico) o para propósitos tributarios (basada en vidas específicas del servicio).